tag:blogger.com,1999:blog-21417826.post113845318584610843..comments2023-10-31T05:41:21.245-05:00Comments on Alejandro Gaviria: El feminismo en la prácticaAlejandro Gaviriahttp://www.blogger.com/profile/08910006598161301475noreply@blogger.comBlogger10125tag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1139617901578650152006-02-10T19:31:00.000-05:002006-02-10T19:31:00.000-05:00Alejandro:Gracias por responder. Van algunas notas...Alejandro:<BR/><BR/>Gracias por responder. Van algunas notas sueltas sobre su comentario. <BR/><I>Pero, creo, que Ud. estaría dispuesta a aceptar: (i) que las vulnerabilidades masculinas han crecido sustancialmente</I><BR/><BR/>A mi me gustaría saber que entiende ud por "vulnerabilidades masculinas", para estar segura de no estar interpretando esto mal -- pero además por que me interesa realmente oírlo. Se me ocurre lo siguiente: Reconozco que, efectivamente, el escenario es otro para los hombres. Pero, creo que no para todos los hombres, no para todas las mujeres. Sin duda alguna es otro para los hombres de su generación y de la mía..."cosmopolitas", occidentales, con cierto nivel educativo--por así decirlo. (En este momento no se me ocurren términos más adecuados, espero que entienda lo que quiero decir) Si, es cierto: creo que uds están teniendo que lidiar con muchas cosas, cambios con los que ni nosotras sabemos qué hacer. Pero no tengo sino que preguntarle a la sra que viene a hacer el aseo a mi casa sobre su esposo para entrar en otra dimensión. Pero bueno, ud podría decirme que eso es hilar muy fino. Entonces, regresando a lo más general, lo del nuevo escenario/crecimiento de las vulnerabilidades masculinas, me parece bien reconocerlo, muy importante. Y me quito el sombrero cuando oigo a un hombre decirlo. Eso me hace pensar que tal vez el debate sea más fructífero si <BR/>1. arranca reconociendo ese nuevo escenario, pero no echandole el agua sucia al feminismo, y<BR/>2. haciendo algunas precisiones. <BR/>Eso signfica que encontramos un punto de acuerdo.<BR/><BR/>Esto me recuerda otra cosa que no me cuadró de la columna (hilando fino de nuevo): extrapolar así de plumazo conclusiones que aplican a EU --al sistema educativo de EU-- a nuestro espacio, especialmente en temas como ese, donde somos tan diferentes. Las diferencias que nos separan a nosotros (como cultura "latina") de la de EU en género son inmensas.<BR/><BR/><I>(ii) que el feminismo excesivo puede ser perjudicial habida cuenta de las nuevas circunstancias.</I><BR/><BR/>Y contraproducente.<BR/><BR/>Lo que yo esperaría que ud estuviera dispuesto a aceptar en este punto es que esos dos puntos que me propone debatir son <B>bien</B> diferentes al punto de partida y al de llegada de su columna. (Lástima que esa haya sido leída por miles y esto por muchos menos; en fin) Huelen, se sienten, se leen, se interpretan diferente. Por su último comentario me parece que lo está. Y así las cosas ambos salimos con algo de este intercambio. <BR/>Suerte.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1139454332770453292006-02-08T22:05:00.000-05:002006-02-08T22:05:00.000-05:00Otra forma de ver la reiteración de la tesis de la...Otra forma de ver la reiteración de la tesis de la escritora es la de ignorar un hecho que esta pasando en toda la sociedad colombiana. Son nuevas realidades y por supuesto hay un cierto temor a interpretarlas y leerlas, se cae en sin sentidos al interpretar la realidad através de las categorías comunes de narcotrafico, patrón, mafia, matones, etc. Se pretende cambiar la realidad mediante las propias lecturas, pero al no haber cambio alguno sólo queda la reiteración en coro. <BR/>¿Además semejantes opiniones no son un insulto al trabajo suyo y de muchos otros? ¿Queda el columnista-investigador herido?Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1139341299090524052006-02-07T14:41:00.000-05:002006-02-07T14:41:00.000-05:00Sandra: Muchas gracias por su opinión. Estoy de ac...Sandra: <BR/><BR/>Muchas gracias por su opinión. Estoy de acuerdo con su crítica de forma (la columna es una colcha de retazos), también coincido con sus punto de fondo (el feminismo no el culpable de los muchos problemas educativos y sociales). Pero, creo, que Ud. estaría dispuesta a aceptar: (i) que las vulnerabilidades masculinas han crecido sustancialmente, (ii) que el feminismo excesivo puede ser perjudicial habida cuenta de las nuevas circunstancias. <BR/><BR/>La columna tenía un tono indignado: quizás motivado por mi lectura del libro de Drexler. Quizás fue la sobre-reacción ante una posición extrema. Pero, bueno, estoy dispuesto a continuar el debate…Alejandro Gaviriahttps://www.blogger.com/profile/08910006598161301475noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1139328488301224672006-02-07T11:08:00.000-05:002006-02-07T11:08:00.000-05:00pd: y sus alumnOs, también. Olvidé decir que este ...pd: y sus alumnOs, también. <BR/><BR/>Olvidé decir que este blog me parece un interesante experimento y que celebro la iniciativa. Ojalá dure y sea un espacio de debate respetuoso.<BR/>Suerte.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1139328121433932992006-02-07T11:02:00.000-05:002006-02-07T11:02:00.000-05:00Alejandro: creo que se están metiendo en un mismo ...Alejandro: creo que se están metiendo en un mismo costal cosas que son distintas: antifeminismo, rendimiento escolar de niños e irrelevancia de los padres. Claro, el hilo conductor son los "excesos del feminismo", y con esa expresión detecto un tufillo de "desprecio" que permea todo el artículo. Considero que es una generalización peligrosa.<BR/><BR/>No voy a entrar en una defensa del feminismo a ultranza por que no me corresponde ni me interesa. Creo que el prototipo feminista que describe Lessing en la cita (y con el cual ud parece estar de acuerdo) está mandado a recoger y es una caricatura que no describe adecuadamente la realidad del "gender gap". Tal vez no nos gusta pensar que incluso hoy, en el siglo XXI, existe el machismo y una realidad social que discrimina a las mujeres en ciertos escenarios y situaciones. Ser feminista, reconocer que las diferencias sociales existen y que las mujeres tienen una experiencia fundamentalmente diferente a la de los hombres en ciertos espacios no debería ser pecado. No significa tampoco que quienes lo reconocemos odiemos a los hombres, el matrimonio y los hijos. Es una asociación perversa, un prototipo al que yo (personalmente) como mujer no me quiero ascribir, ni quiero que se me endilgue. La cosa no es por ahí. Excesos los hay, y estamos de acuerdo en que la tesis de la "irrelevancia de los padres" , por ejemplo, es una cosa complicada. Pero no mezclemos las cosas. No simplifiquemos.<BR/><BR/>Yo (también) tengo mis dificultades con el término <B>feminismo</B>, seguro que por la carga negativa que en parte se merece y en parte se ganó, desde la década de los 70s. Pero de ahí a que el <B>feminismo</B> tenga la culpa de los problemas en el sistema educativo y en el desarrollo de los niños...PUFFF!!! No será más bien que las dificultades provienen de problemas estructurales mas amplios? Tal vez también afecten a las niñas, solo que distinto. En fin, no soy una experta en pedagogía, no me siento con autoridad para pontificar. <BR/><BR/>Me parece preocupante que un hombre como ud concluya este artículo (peligrosa colcha de retazos) con un llamado al "contraataque".<BR/><BR/>CUAL ATAQUE? Ese es a mi juicio, parte del problema con el feminismo: que algunas lo entendieron como una batalla campal, a muerte, de aniquilación, y que así fue recibido por los hombres. Reconozco que de no haber sido así, muchas cosas no habrían cambiado. Pero esta parece ser una época en que estamos llamados a plantearnos los debates en otros términos, lejos de las peleas, las artimañas y el comportamiento defensivo, empezando por reconocer que no los hemos agotado. Abra el debate, me parece valido, pero pilas con los términos. Las mujeres de su vida, sus alumnas, y las que no respondemos a los prototipos mañidos de ninguno de los dos extremos nos merecemos eso, por lo menos.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1139000126017179852006-02-03T15:55:00.000-05:002006-02-03T15:55:00.000-05:00Antes que nada, me alegro que Alejandro G. abra es...Antes que nada, me alegro que Alejandro G. abra este blog, sabiendo las ocupaciones de él, espero le quede suficiente tiempo para que sea algo interactivo.<BR/><BR/>Sobre el feminismo radical del que habla esta columna, estoy de acuerdo con que cualquier extremo es vicioso. Ni ser machista recalcitrante ni feminista odia hombres es la solución. Pienso que debe ser más una igualdad en derechos con un reconocimiento mutuo de las diferencias naturales de género las que deben guiar un mutuo acuerdo para vivir mejor.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1138662809221153622006-01-30T18:13:00.000-05:002006-01-30T18:13:00.000-05:00Excelente idea abrir este blog que honra a la Blog...Excelente idea abrir este blog que honra a la Blogosfera colombiana, y excelentes los dos artículos publicados aunque a mí me gustó más el de la pobreza rural, y no es que sea propiamente antiuribista.<BR/><BR/>Lo que me parece a mí del feminismo, más allá de lo consignado en este artículo, es que plantea una serie de reivindicaciones igualitarias que en Colombia están lejísimos de alcanzarse. Ya considerando el discurso tal como se presenta en el primer mundo, encuentro sólo un "motivo" del vastísimo repertorio identitario de la izquierda moderna. ¿No sería más interesante examinar el conjunto de esa ideología? Por ejemplo, esas mismas personas aplauden a Evo Morales, para quien el terrorista es Bush, y echan tierra sobre hechos tan enternecedores como la queja de Chávez contra el dominio de los asesinos de Cristo. El que se intente imponer la excepción como la norma (en el caso del feminismo) es apenas típico, no se trata de las mujeres, sino que éstas son una clientela potencial del negocio de la reivindicación (junto con los homosexuales, los inmigrantes, los diferentes y en general todos los que puedan organizarse en grupo de presión).<BR/><BR/>Perdón por extenderme tanto: lo que me parece es que ese proyecto de reeducación es sólo una formulación de un proyecto totalitario y nihilista que está tácito en ese discurso. El consejo de sabios decide que ha habido demasiado protagonismo del modelo masculino y apremia para que las personas se puedan moldear según un concepto más elevado y equitativo... ¿No les suena algo como conocido, como la pasión colombiana de luchar contra la pobreza?Ruiz_Seniorhttps://www.blogger.com/profile/16248545846005684122noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1138662680191434492006-01-30T18:11:00.000-05:002006-01-30T18:11:00.000-05:00Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.Ruiz_Seniorhttps://www.blogger.com/profile/16248545846005684122noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1138636268644871302006-01-30T10:51:00.000-05:002006-01-30T10:51:00.000-05:00No estoy seguro de entender totalmente pero, no po...No estoy seguro de entender totalmente pero, no podríamos simplemente reiterar que, como dicen las mamás, <I>cualquier extremo</I> es vicioso?<BR/><BR/>En todo caso, bienvenido también... qué bueno sería que todos los columnistas abrieran este espacio!/|-https://www.blogger.com/profile/00130973274655209727noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-21417826.post-1138576081777683052006-01-29T18:08:00.000-05:002006-01-29T18:08:00.000-05:00“Los muchachos son tratados como niñas defectuosas...“Los muchachos son tratados como niñas defectuosas”. <BR/>Voy a decir una obviedad, y es que hace casi medio siglo, la queja de las precursoras del feminismo era esa misma pero al revés:"las niñas somo tratadas como varones defectuosos". Eso, si bien nos iba. Pero el punto que quiero destacar realmente tiene que ver con el "paradigna de la venganza" que se puso en boga durante la era de las reivindicaciones feministas, y que nos condujo a lograr "que la tortilla se vueva", como rezaba aquella canción de protesta de la época, es decir "que las niñas coman pan, y los varones mierda (parodiando lo de pobres y ricos). Y eso, francamente, está teniendo consecuencias nefastas en los niños, en su identidad, en la manera como se perciben. Y por eso ahora como que se esconden, se camuflan: viven agobiados, confundidos, debilitados. Pero llegará el momento en que las actuales "devoradoras", las "dominadoras" se agoten de su falso papel de amazonas de feria, y terminen clamando, a lo Isabella Santodomingo, que "prefieren ser mantenidas". Así que ahí va otra "revolución" totalmente desperdiciada. Qué pena, che, como dirían los argentinos.Anonymousnoreply@blogger.com